Después de que el 3 de noviembre de 2008 ganáramos el juicio por cesión ilegal de trabajadores y despido nulo, Laya Producciones y la UNED decidieron recurrir la sentencia. Ahora es el Tribunal Superior de Justicia el que nos vuelve a dar la razón desestimando todos sus argumentos. Lo más gracioso de todo este largo proceso judicial, costoso e inútil, es que todavía podrían interponer un "recurso de casación para la unificación de doctrina" en el Tribunal Supremo. No sabemos hasta dónde están dispuestas a llegar estas dos empresas con tal de no readmitirme pero desde luego sus actitudes les están retratando y la foto no es nada bonita. ¡Con lo sencillo que hubiese sido reconocer la injusticia a tiempo y llamarme para volver a trabajar! Mientras, aquí seguimos, con la misma energía del primer día y sin retroceder un ápice en nuestro objetivo: la contratación directa sin falsos intermediarios, ya sean Empresas de Trabajo Temporal o "pseudocontratas".
Fructíferas sinergias se producen entre el Estado y las subcontratas, unos, gestionando mal un dinero que no es suyo, y otros, enriqueciéndose con el trabajo ajeno y con los contratos fraudulentos de las Administraciones. Mientras, los trabajadores, a pagar impuestos para que unos y otros vivan de la sopa boba y sin tener ningún poder de decisión sobre éstos. De fondo, su Justicia, que tarda un año y pico en comprobar de qué color es el caballo blanco de Santiago.
Un fuerte abrazo a todos los compañeros de la CNT que con todas sus muestras de solidaridad me dan ánimos para seguir y me enseñan día a día lo que significa el apoyo mutuo.
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Mucho ánimo.
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